miércoles, septiembre 02, 2009

Sadud

Cuánto daño me hice cuando buscaba guiños y complicidades que no iban dirigidas a mi
Cuánto daño me hice jugando a ese juego, que no es un juego, de ausencia.

Por otro lado, como dicen que los caminos del señor son inescrutables, tal vez donde yo veo autolesiones lo que hay en realidad son autocuraciones… es una mierda el que tenga que llegar a vieja para saberlo con una supuesta certeza.

Aún así, ahora mismo sólo queda seguir planteando dudas existenciales para desmadejar con paciencia en la vejez.

Aunque sean tontas perdidas.

8 comentarios:

*V* dijo...

No eres un vieja v_v

Pipilota dijo...

No claro, aún no. Por eso sigo ignorando una barbaridad de cosas.

Pero espero ser algún día vieja y sabia

Anónimo dijo...

A todos nos pasa lo mismo, el atrevimiento y aplomo que se muestra en la juventud suele estar basado más en mostrar posturas cara a la galería que en la verdadera experiencia. Uno nunca deja de aprender, si está dispuesto a ello, según envejece, y paso de las supuestas connotaciones negativas de ese concepto.

David A.

Pipilota dijo...

Connotaciones negativas...
De eso tengo a toneladas últimamente.
Vaya mierda de Agosto y Septiembre sólo parece que vaya a ir a peor.

En fin, todo esto por suerte o por desgracia pasará.

Anónimo dijo...

dimemaquina escribió...

Dudas existenciales, tontas perdidas...
¡Qué familiares me resultan! :D

Estoy con David. Siempre podemos aprender..., incluso de los ausentes.

Bss

Pipilota dijo...

Sin duda

lentejas dijo...

Es una mierda tener en teoría "libertad" para decidir y sólo poder nadar en dudas y miedos...

A veces me encantaría que alguien se pudiera encargar de esas cuestiones difíciles que nos corroen y no tener que debatirse más, descansar...

Pipilota dijo...

Es el doble filo del libre albedrío. ¬¬

 
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